Gracias
que a principios de los años setenta, dos pioneros supieron
aprovechar la visión táctica que habían esbozado algunos
estrategas para la investigación y la inteligencia militar, un par
de décadas después se abrieron las puertas de la
sociedad de la información y
por tanto se abre la veda para una nueva economía basada en la
comunicación.
En
consecuencia, hoy, y basándose en la máxima: “La información os
hará libres”, la desmedida ambición de quienes controlan los
aparatos de poder,
se han asegurado de ser los proveedores de la información al
usuario, dando acceso inmediato a la vez, que han ido acotando
ladrillo a ladrillo la entrada al país de las maravillas,
consiguiendo así, el máximo pago posible por toda esa información.
A través de estrategias de recentralización de La
Red, tanto
de Software como de Hardwere, han limitado al usuario su estado de
independencia y autonomía.
Paradójicamente, mientras el volumen de
datos crece y crece el coste de Hardwere disminuye potencialmente, de
ahí nace la insistencia de entrar a navegar a través de la
nube, (Amazón,
Google, Microsoft®
y Sales Force) y así recuperar el control y crear dependencia en los
usuarios.
El
Software Libre que
Richard Stallman creara y desarrollara, hace casi tres décadas, es
hoy, por desgracia para algunos, una realidad innegable, y por lo
tanto y como respuesta, nacen los sistemas
operativos para móviles,
que lejos de ser un sistema libre, mantienen enjaulado al usuario,
imposibilitando hacer lo que no haya sido pensado por el creador del
dispositivo, el mismo sistema que utiliza una Tablet.
En
la “neutralidad de la red”,
no es que Internet llegue al movil, sino que que el movil, llega a
Internet.
Los
portátiles nos llegan ya en dos módulos para que utilicemos la
pantalla a modo de Tablet y que poco a poco la potencia y libertad de
la que disfrutamos con nuestro PC, se transforme en la limitada
sencillez de un móvil.
La
llegada del nuevo Hardwere de capacidades limitadas por un software
centralizado, idílico,sin sorpresas y encorsetado, ha comenzado la
toma de los ordenadores personales, (Windows 8, es muy posible que
pueda impedir la instalación de Linux).
Las
estanterías de los comercios se inundan de económicas tabletas, que
sutilmente desplazan al ordenador personal, abierto, configurable y
manipulable que hasta hace poco, nos ha acompañado, aumentando su
precio y convirtiéndolo en lujo exclusivo para profesionales.
En
poco tiempo, la mayoría caminaremos con nuestra Tablet-PC,
diseñada
para consumir y no para crear.
Es
fundamental que en la Revolución
Digital de
la que hoy somos todos protagonistas gracias a la informática
personal , defendamos el uso del Software con el que hemos ido
creciendo, manteniendo la autonomía y la libertad digital de la que,
hasta ahora hemos disfrutado y evitando la
Tabletización
personal.
Cristina
Ibarra Alfaraz
5 comentarios:
La tabletización puede ser entendida como un proceso de evolución de los sistemas operativos incluidos en los ordenadores, hacia los sistemas operativos comprendidos en los dispositivos móviles, cuyo mayor exponente, son las tablets.
Este proceso es generado por los fabricantes tanto de los dispositivos tecnológicos, como de software que pretenden crean plataformas cerradas, para que el usuario no pueda efectuar modificaciones. En caso contrario, podría provocar la inutilización de dicho dispositivo.
Al igual que Cristina, destaco el papel que tendrá en la sociedad la tabletización, la cual provoca dos claras consecuencias: la pérdida de autonomía por parte de los usuarios y, por otra parte, un obstáculo en el avance de Internet.
Alba González Saiz
Bajo mi punto de vista, creo que las tablets, son una forma de modernizar el tema de las nuevas tecnologías.
Pasamos de los ordenadores con cajetilla donde se encontraba la CPU, a portátiles donde podías utilizarlos para hacer trabajos o trastear con el ordenador desde cualquier lugar, y ahora surge esto, sin necesidad de tener que llevar a cuestas un cargador o facilitar su uso y traslado.
Además creo que para nosotros, como futuros periodistas, servirá como una herramienta imprescindible.
¡QUIERO UNA TABLET!
Amanda Sampedro Bustos.
Yo creo que los tablets son un gran invento. Gracias a ellos ahora nos podemos llevar Internet con nosotros.
Ya metiéndonos en el proceso social al que nos referimos, la tabletización solo tendrá éxito si olvidamos nuestro criterio, como hicimos con la televisión. Espero que esta vez las personas no destrocemos un invento que puede tener muchos aspectos positivos, aunque creo que finalmente nos comportaremos como ovejas que siguen al pastor, como siempre.
Adrián Gándara Coca
Siempre me ha llamado la atención el mundo táctil que se esconde tras la pantalla. Ese que hace que tan solo pulsando una pantalla puedas conectarte a la red, hablar con amigos y familiares o ver el tiempo de una ciudad en la que nunca hemos estado. La aplicación de la pantalla táctil creo que será una gran ayuda para todos, incluso a personas con distintos tipos de deficiencias.
Respecto a la idea que plasma Cristina respecto al Software libre y los sistemas operativos para móviles planteo una duda, que seguro que de aquí a unos años seremos capaces de responder: ¿Será posible la implantación de un sistema operativo desarrollado como software libre? Ahora mismo no podemos contestar afirmativamente a esta cuestión, aunque espero que en no mucho tiempo seamos capaces de hacerlo.
Opino que las consecuencias citadas por Alba, son consecuencias que hay que tener en cuenta por parte de los usuarios para evitar una posible dependencia de estas tecnologías. No digo con esto que dejemos de usarlas sino de saber utilizarlas de una manera “concienciada”.
Estamos viviendo, como dice Amanda, un proceso de disminución de nuestros ordenadores; pero espero que esto no signifique que la información se vuelva también más simple y digerible, sino que como dice, sea una herramienta mas en nuestro trabajo futuro.
María Doñoro Peñaranda
En mi último comentario, en la pregunta quería hcer alusión a un sistema operativo de software libre para telefonía móvil.
María Doñoro Peñaranda
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